Rafoso y Lago.

Si es que falta cultura.

Ya son 531 apellidos en el blog.

Creo que la seriedad con que abordo el contenido estrella de este blog, el origen de los apellidos, no implica que no pueda añadir imágenes agradables, entretenidas, divertidas a veces. Y eso hago, para que usted aborde el tema del origen de su apellido con distensión. ¡Que así sea! Ah, en “Libros de Heráldica y Genealogía” (en los enlaces de esta página) puede solicitar la historia completa del apellido (en esa página ver y pinchar Investigación Genealógica en la columna de la izquierda). Se lo entregan de forma similar a esta, o como ustedes prefieran.

Utilizo imágenes que aparecen en Internet. Suplico disculpas a sus propietarios (Si alguna de las imágenes infringe o vulnera la privacidad o los derechos de autor, ruego que os pongáis en contacto conmigo para retirarla inmediatamente).

  

Cuéntalo a tus amigos para que sepan donde pueden encontrar el origen de su apellido. Y aunque creas (o crea) que el que tiene/s solo es el s/tuyo y el de s/tu familia, solicítalo de igual manera en cualquiera de los “comentarios” de este blog. ¡Una aclaración! Los datos aquí expuestos, fidedignos, son una parte de las referencias que tengo y que, entre otras cosas, no les puedo facilitar donde se han obtenido, por formar parte del patrimonio de la librería EyP; siendo ellos los “sabedores” del valor de dicha información y a quienes, o donde,  se puede consultar sobre la misma. Otro dato importante se refiere a que la prodigalidad de apellidos no nos permite entrar en genealogías individuales. Quiere esto decir que “nunca”, “nunca” vamos a acometer el estudio profundo de la familia de un apellido (abuelos, bisabuelos, etc.), para ello hay otros expertos genealogistas colaboradores de la librería. En la librería EyP si se harán precisos árboles genealógicos, escrupulosos escudos, perfectos dosieres  familiares (en imitación de papel pergamino), pero siempre con sus propios datos, o la información proporcionada por nosotros o nuestros colaboradores a partir de sus observaciones. Así y todo, me enorgullezco de saber “algo” de 304.813 apellidos (incluidos los extranjeros que se encuentran actualmente viviendo en España, y de los que hay mas de 5 individuos, o de aquellos militares que a lo largo del tiempo han sido oficiales españoles y extranjeros de nuestro Ejército) y de decir aquí una pequeña parte, incluyendo aquellos apellidos considerados de difícil localización.

Rafoso

Yasnaya Rafoso Argüiz,
defensora de los Derechos
Humanos, en Cuba.

Casi con certeza, pero sin poderlo demostrar, este apellido pertenece a uno de los colonos europeos que llegan al centro y sur de España, para repoblar alguna de sus poblaciones.

La crisis que vivía toda Europa favoreció la recluta de inmigrantes que no sólo fueron alemanes y flamencos sino también franceses, suizos e italianos. Las Nuevas Poblaciones de Sierra Morena y Andalucía se van gestando desde el Reinado de Fernando VI (1746-1759) para llegar a materializarse con el equipo ilustrado de Carlos III (1759-1788), y años después de su asentamiento solían emprender viaje por las poblaciones y provincias cercanas, muchas de las veces españolizando su apellido.

De esta manera ya se les localiza en San Fernando (Cádiz). A lo largo de los años pasarían a Chipiona, donde aun quedan representantes de esta familia.

Han pasado a Cuba, con sede en La Habana, y Estados Unidos, con sede en Florida.

Lago

Clara Lago, madrileña por más señas,
actriz. De los buenos, la mejor.

Algunos tratadistas dicen que es un antiguo apellido de Galicia que tuvo casas solares en los lugares de Macide y de Cadeira, aunque el primer lugar no figura en los actuales diccionarios geográficos. En cuanto a Cadeira, según los hermanos García Carraffa, existe en La Coruña una villa y una parroquia en el partido judicial de Ortigueira y otra parroquia en el partido judicial de Redondela, de la provincia de Pontevedra, que nosotros no encontramos, aunque Madoz señala un lugar de este nombre en el ayuntamiento de Trabada, en la feligresía de San Esteban de Fornea, en la provincia de Lugo.

Otros autores encuentran raíces del mismo en Portugal y en la montaña de Cantabria. Existiendo otra importante rama en el concejo de Ibias, en Asturias.

Juan Francisco de Hita manifiesta que los del apellido que nos ocupa proceden de la familia Lacos, muy antigua, y que por corrupción del vocablo comenzaron a llamarse Lago y Lagos.

Viendo las malas hazañas del "Nuberu" asturiano, en los Parises de la Francia,