Bueno y Lozada.

Pues yo que tengo todos los apellidos españoles... ¿Qué podré hacer si  doña Electricidad cumple su palabra?

Ya son 436 apellidos en el blog.

Creo que la seriedad con que abordo el contenido estrella de este blog, el origen de los apellidos, no implica que no pueda añadir imágenes agradables, entretenidas, divertidas a veces. Y eso hago, para que usted aborde el tema del origen de su apellido con distensión. ¡Que así sea! Ah, en “Libros de Heráldica y Genealogía” (en los enlaces de esta página) puede solicitar la historia completa del apellido (en esa página ver Investigación Genealógica en la columna de la izquierda).

Utilizo imágenes que aparecen en Internet. Suplico disculpas a sus propietarios (Si alguna de las imágenes infringe o vulnera la privacidad o los derechos de autor, ruego que os pongáis en contacto conmigo para retirarla inmediatamente).

  

Cuéntalo a tus amigos para que sepan donde pueden encontrar el origen de su apellido. Y aunque creas (o crea) que el que tiene/s solo es el s/tuyo y el de s/tu familia, solicítalo de igual manera en cualquiera de los “comentarios” de este blog. ¡Una aclaración! Los datos aquí expuestos, fidedignos, son una parte de las referencias que tengo y que, entre otras cosas, no les puedo facilitar donde se han obtenido, por formar parte del patrimonio de la librería EyP; siendo ellos los “sabedores” del valor de dicha información y a quienes, o donde,  se puede consultar sobre la misma. Otro dato importante se refiere a que la prodigalidad de apellidos no nos permite entrar en genealogías individuales. Quiere esto decir que “nunca”, “nunca” vamos a acometer el estudio profundo de la familia de un apellido (abuelos, bisabuelos, etc.), para ello hay otros expertos genealogistas colaboradores de la librería. En la librería EyP si se harán precisos árboles genealógicos, escrupulosos escudos, perfectos dosieres  familiares (en imitación de papel pergamino), pero siempre con sus propios datos, o la información proporcionada por nosotros o nuestros colaboradores a partir de sus observaciones. Así y todo, me enorgullezco de saber “algo” de 304.791 apellidos (incluidos los extranjeros que se encuentran actualmente viviendo en España, y de los que hay mas de 5 individuos, o de aquellos militares que a lo largo del tiempo han sido oficiales españoles y extranjeros de nuestro Ejército) y de decir aquí una pequeña parte, incluyendo aquellos apellidos considerados de difícil localización.

Bueno

Son varias las casas solares que existen de este apellido, aunque sin parentesco entre ellas.

 

Joaquín Bueno Lara, cardiólogo. En sus manos
están puestas muchas vidas.

Pedro Vitales, quien se intitula "prior de Gurrea y canónigo de la Yglesia de Jesús Nazareno de Monte Aragón", en su manuscrito "Nobiliario de Armas y Apellidos del Reyno de Aragón" dice que es "noble linaje que tuvo en España diversas casas solares, siendo una de las más antiguas la que radicó en las montañas de Jaca y cuyos individuos eran infanzones de Aragón…"

Hita y otros autores manifiestan que algunos de esos Bueno, aragoneses, pasaron a Valencia con el Rey don Jaime I "el Conquistador”.

Otra casa de este apellido estuvo sita junto al lugar de Cadagua, del valle de Mena y partido judicial de Villarcayo (Burgos).

De esa casa dimanó una rama de Vizcaya, que tuvo su asiento en el concejo de Güeñes, del partido judicial de Valmaseda.

Lozada

Astrid Lozada, una ex-miss venezolana de concurso.

Infiero que el apellido escrito de esta manera es fruto del “ceceo” que consiste en pronunciar la letra “s” con un sonido similar al que corresponde a la letra “z”, fenómeno dialectal que fue un préstamo tomado de la lengua árabe, y que quedó mayoritariamente en Andalucía, y de esta manera llevado en primitivos tiempos a algunos países iberoamericanos.

A nadie se puede acusar de semejante característica, puesto que al escribir proyectas un mundo a tu medida, y la pronunciación ceceante está completamente valorada entre los hablantes que la practican, y ha perdido el estigma que acarreaba frente al seseo o lo que se decía que era distinción.

Y anota Vilar y Pasqual, en su “Diccionario de la Monarquía Española” que son varios quienes llevaban este nombre, aunque en otros lugares, los mismos personajes mencionados por Vilar y Pasqual se han escrito como Losada.

El agua, el paisaje, para relajarse.