Cara y Arrufat.

A veces con las imágenes, siempre tomadas de Internet, soy atrevido ¡Mis disculpas a quien le puedan molestar! Pero trato de llamar la atención hacia el blog, por cualquier medio, bajo cualquier circunstancia. Imito a Dalí, que los escaparates de una joyería de las más importantes de Nueva York, los llenó de jamones, y alguna joya. Una manera de solicitaros vuestra parada, de procurar vuestra atención, y que de esta manera aprovechéis a ver los apellidos. Mi trabajo me cuesta hacerlos. Alguien, sin idea, señala que tendría que poner en un blog de apellidos, el blasón de la familia. Y reitero que es eso, de la familia, no del apellido, pues este no tiene escudo, PERO SI ORIGEN. 

Cuéntalo a tus amigos para que sepan donde pueden encontrar el origen de su apellido. Y aunque creas (o crea) que el que tiene/s solo es el s/tuyo y el de s/tu familia, solicítalo de igual manera en cualquiera de los “comentarios” de este blog. ¡Una aclaración! Los datos aquí expuestos, fidedignos, son una parte de las referencias que tengo y que , entre otras cosas, no les puedo facilitar donde se han obtenido, por formar parte del patrimonio de la librería EyP; siendo ellos los “sabedores” del valor de dicha información y a quienes, o donde,  se puede consultar sobre la misma. Otro dato importante se refiere a que la prodigalidad de apellidos no nos permite entrar en genealogías individuales. Quiere esto decir que “nunca”, “nunca” vamos a acometer el estudio profundo de la familia de un apellido (abuelos, bisabuelos, etc.), para ello hay otros expertos genealogistas. En la librería EyP si se harán precisos árboles genealógicos, escrupulosos escudos, perfectos dosieres  familiares (en imitación de papel pergamino), pero siempre con sus propios datos, o la información proporcionada por nosotros a partir de sus observaciones. Así y todo, me enorgullezco de saber “algo” de 302.100 apellidos hispanos y de decir aquí una pequeña parte, incluyendo aquellos apellidos considerados “raros” o de difícil localización.

Cara

Cara, Cara no había, pero ¿que les parece esta?

Por un lado, y según diferentes genealogistas, este linaje procede de Guipúzcoa, con solar en la villa de Usúrbil, del partido judicial de San Sebastián. Para otros autores este apellido es el mismo que Carra.

Etimológicamente López Mendizábal dice que procede de 'ara', 'aro', helecho, con C protética. Para Sabino de Arana quiere decir cal, de 'kare', 'kara'. Para otros 'ara' sería pasto.

Es difícil aceptar, sin más, esta teoría, puesto que los Cara, desde el principio del descubrimiento, al emprender la aventura americana necesitan dar el nombre de sus padres y el lugar de su vecindad o naturaleza, descubriendo su procedencia, que no es la vasca, sino Pastrana o Azuaga (Badajoz).

En Aragón se les documenta en Fuentes (hoy Fuentes del Ebro). Habrá otra rama de este apellido con naturaleza conquense.

Arrufat

Antiguo linaje de origen aragonés que se vió escrito como Arrufat, Arruffat, Arufat, Aruffat, Arupfat y Arrufach, de donde pasó a Castellón de la Plana, Onteniente, Villena y Bihar.



Andrés Piquer Arrufat.



Alfons d'Arrufat fue personaje legendario citado en las espúreas “Trobas”de mosen Febrer, como "cavaller de la Conquista". "Son pruebas de su grande ingenio - dice - los muchos favores con que le honró el rey don Jaime, que le encargó de la fundación de la Villa: él lo cumplió, limpiando su territorio de mucha maleza; procuró dar vado a las aguas detenidas, formando el declive con prodigiosas acequias, para que fuesen a parar al mar". Efectivamente a un Alfons d'Arrufat se le atribuyen los planos de construcción de la nueva villa de Castellón cuando se trasladaron del Castell de Fadrell al Pla.

Un hijo de este sirvió a Pedro IV el Ceremonioso en la jornada que hizo contra el castillo y villa de “Moruedre”, cuando se alzaron contra Pedro de Castilla. Durante los seis meses que duró el cerco el mencionado caballero "hizo muchas cosas y hazañas bien hechas", según escribe Viciana.

La voz arrufat, si aragonesa, procedería de arrufar que es cuando se le ponen las orejas tiesas al animal cuando se asusta. Si fuese una voz catalana estaríamos ante el participio pasado del verbo arrufar, fruncir, arrugar el rictus de la cara. Un arrufat será pues la persona que siempre tiene la cara seria.

Un tanfa "apañao"